A través de la red HazteOir [http://www.hazteoir.org/node/14476] he enviado esta carta al presidente Zapatero:
Si hay algún tipo de pena de muerte especialmente terrible y atroz es el aborto. Los condenados a la pena capital han tenido, en algunos países, un juicio, un abogado defensor y un proceso jurídico en el que normalmente se cuidan con especial esmero todas las garantías necesarias.
Sin embargo, el ser humano no nacido no tiene voz, no tiene defensa posible, ninguna garantía procesal se le aplica, por lo que su ejecución se convierte en el más atroz y horrible crimen que la humanidad pueda perpetrar. Y esto, considerando la enorme magnitud de las cifras de muerte por aborto en todo el mundo, unos CINCUENTA MILLONES, lo convierte además en el genocidio más masivo de toda la historia de la humanidad.
EL ASESINATO DE EMBRIONES, FETOS O NASCITURUS NO ES DE IZQUIERDAS. La izquierda siempre se ha caracterizado por defender a los débiles. El PSOE y otros partidos que se llaman "de izquierdas" en España han hecho dejación de los principios que movieron a los primeros socialistas. Su único motor parece que es el dinero y su única bandera, EL FEMINISMO. Pues bien, señor presidente: los feministas afirman que a la mujer se la trata como a un objeto. ¿No se dan cuenta de que ellos y ellas (feministas) hacen lo mismo con los niños no nacidos cuando defienden el aborto como si fuera una conquista social? ¿Hay algo más evidente que la "cosificación" que sufren los no-nacidos a manos de los doctores de la Muerte, con la complacencia de sus madres? ¿Alguien se preocupa de esas madres que sufrirán trastornos el resto de su vida por el asesinato cometido?
Llamemos a las cosas por su nombre: el aborto no es una conquista social sino UNA INMENSA INDUSTRIA que produce beneficios económicos (no sociales) TRITURANDO SERES HUMANOS.
Señor Presidente, no caiga usted en la hipocresía y muéstrese igual de valiente para luchar contra el aborto como se muestra para luchar contra otras formas de pena de muerte. Es más, el aborto no es una pena de muerte porque no ha habido un juicio previo (si lo hubiera, siempre sería absolutorio porque el no-nacido es el inocente por excelencia): es simple y llanamente UN ASESINATO.
La degradación moral que produce en una sociedad el asesinato impune lleva a situaciones que luego ustedes, los políticos, se empeñan en no entender: la violencia de género, el terrorismo, la violencia en las aulas, la pedofilia y pederastia... ¿Cómo decir a toda esa gente que son delincuentes cuando está protegido por las leyes el asesinato más cruel e injustificable, el de un ser humano indefenso, un niño al que le faltan unos meses, semanas o días para ver la luz?
Cuando se desarma moralmente a una sociedad, las consecuencias son impredecibles. No crea que el genocidio nazi ocurrió de un día para otro. Fue la conclusión inesperada de una violencia introducida por el partido Nacional-Socialista en el poder en la sociedad desde unos años antes.
Ya sé que Usted está muy ocupado y no tiene tiempo para reflexionar sobre todo esto, pero tal vez sus asesores sí que pueden hacerlo por usted, y pueden aconsejarle bien. Para muchos españoles, entre los que me incluyo, este tema es más prioritario que la propia crisis económica.
Atentamente,
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