Aprendamos la lección de los griegos

Cuando estudiaba historia en bachiller, se nos ponía como ejemplo de civilización avanzada la de los griegos, porque habían llegado a la forma de gobierno basada en la democracia. Los ciudadanos podían elegir a sus representantes, votar leyes e incluso decidir sobre el destierro de algunos convecinos cuyo comportamiento hubiese sido antisocial.

No obstante, a los alumnos nos parecía chocante y bastante incongruente que una sociedad tan democrática arrastrase una lacra tan inhumana como era la marginación de la mujer. Efectivamente, nos enseñaron que las mujeres eran encerradas en una parte de las viviendas, llamada gineceo, de donde no podían salir si no era con el consentimiento del varón. (Las relaciones sexuales se consideraban perfectas si eran entre varones; con las mujeres sólo se les daba un valor reproductivo). En otras palabras: las mujeres no eran ciudadanos. Eran consideradas casi como los esclavos.

Hoy nos damos cuenta de que su democracia era tremendamente imperfecta debido a esta marginación de la mujer.

Nuestra democracia es tremendamente débil e imperfecta por razones parecidas, aunque más graves. Miles de niños no nacidos son masacrados en clínicas que deberían destinarse a salvar vidas. Esos asesinatos son pagados con impuestos de todos y eso nos convierte a todos en cómplices. Las madres que se someten al aborto quedan marcadas psicológicamente de por vida... Detrás de un aborto hay muchas consecuencias que serían largas de explicar aquí.

Esto lo saben los políticos y la gente bien informada, pero el aborto se mantiene y avanza con nuevas leyes permisivas debido al conformismo e ignorancia de esa mayoría silenciosa que vota cada cuatro años y con eso ya siente que le tienen en cuenta. Pero es de hecho la industria del aborto la que lo promueve por medios inconfesables. Las feministas, los políticos y los medios de comunicación son simplemente los colaboradores necesarios, a quienes se les atrae unas veces con dinero y otras con soflamas pseudo-humanitarias.

Deducimos, pues, que algún día, esperemos que cercano, los historiadores se llevarán las manos a la cabeza al comprobar que nuestra sociedad, tan orgullosa de sí misma, permitía el holocausto de cientos de miles (millones en todo el mundo) de niños que estaban por nacer. Así como ahora nos escandalizan los sacrificios rituales de niños en las culturas precolombinas, y no eran tantos como ahora, algún día otros seres humanos nos juzgarán desde la historia y verán la brutalidad que se escondía en las cloacas de nuestra presuntuosa "democracia".

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Let's learn the Greeks' lesson

When I was a secondary school student, the ancient Greeks were shown as an example of "advanced" civilization, because they had reached a goverment style based on democracy. Citizens could elect their representatives, laws and even to put abroad those who had been antisocial.

However, we the students were shocked by the incongruence that a so democratic society could be drawn by such a stupid concept as the women humilliation. We were taught that women lived in closed zones of the houses called "gineceus", from where they couldn't go out without a male approval. That behaviour looks atavic nowadays, doesn't it? (Sexual relations were considered perfect only if they took place between males; with women they only had a reproductive consideration). In other words: women weren't citizens. They were considered almost as slaves.

Today we realize how much imperfect their democracy was due to this women's undervaluation.

Our democracy is tremendously weak and imperfect for some similar reasons, although more severe. Thousands of unborn children are killed in clinics that should save lifes instead. That massacre is paid with our taxes and that makes all of us accomplices. Mothers that submit themselves to abortion suffer psychologic deseases the rest of their lifes... Behind an abortion there is a list of consecuences too long to mention here.

Politicians and well-informed people know them, but abortion stay and goes forward with new permissive laws, due to the ignorance and conformism of a quiet majority that vote every four years and that's why they think they are taken into account. In fact, is the abortion industry which is promoting it by unconfessed means. Feminists, politicians and media are just necessary collaborators, who are joined sometimes with money and some others with pseudo-humanistic speechs.

Let's deduce that some day, and hope not far, historians will scandalize to see that our society, so proud of itself, was allowing the holocaust of millions of unborn children. The way we show ignominy by the ritual sacrifices of children in pre-colombian cultures, and they were not so many as now, some time in future other beings will judge us from the History and they will recognize the brutality that was hidden in the cesspools of our pretentious "democracy".