De todo lo que ha pasado estos días en Japón, lo que me llama la atención es que con lo inteligentes que considero yo a los nipones, me extraña que hayan apostado por la energía nuclear, siendo un territorio con tanto riesgo sísmico. Creo que deberían haberse esforzado en obtener energía maremotriz o de otras fuentes renovables, pero no de la nuclear, para no verse como se ven ahora.
Por el contrario, aquí en España que tenemos un riesgo muy bajo de terremotos intensos (alguno débil siempre ocurre), no apostamos por la energía nuclear. No es que yo sea partidario acérrimo de esta energía, pero sí soy partidario de que las centrales que ya están funcionando, lo hagan todo lo posible dentro de una vida útil basada en razones de seguridad y no de oportunismo político (como ha ocurrido con el caso de Garoña).
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