lunes, 4 de abril de 2011

Un guiño a los ecologistas y bienpensantes

Ya hablé de la prohibición de ir a más de 110 km/h aquí y aquí.

El otro día me sorprendí a mí mismo con una idea que me rondaba. ¿Porqué ha tomado el gobierno esta medida en cierta medida impopular?

La medida ha coincidido con la entrada de España en la guerra de Libia hace unas semanas. Ahora no hemos visto las multitudinarias protestas en las calles contra esa decisión del gobierno, tomada antes de que hubiera una resolución de la ONU para intervenir en prevención de bajas civiles.

Con el PSOE, España ha entrado de cabeza en esta guerra, desde casi el principio y sin resolución previa de la ONU. A diferencia de la presencia española en la guerra de Irak, a donde llegamos después de los USA hubieran tomado el país y depuesto al tirano. La misión entonces era de pacificación y la ONU reconoció a los EE.UU. el papel de potencia beligerante y responsable de la pacificación, con la colaboración de los países que quisieran. Ahí entró España. Pero bueno, no nos vayamos por las ramas. Simplemente, quería hacer notar que no hemos visto a los agitadores de masas alentando contra la guerra de Libia como lo hicieron contra la de Irak. Tampoco hemos visto al "clan de la Zeja" protestar por este asunto.

Volviendo al tema. El gobierno, alegando posible desabastecimiento, emite una Ley que pretende reducir el consumo de combustibles, aunque los ingenieros entendidos en la materia ya han dicho que la reducción será poca o nula, al no poder usar la 6ª velocidad muchos coches que ya  disponen de ella (necesitan ir a 120 para meter la 6ª y gastarían menos que a 110 en 5ª).

Pero es un guiño a los ecologistas, muchos de los cuales están imbrincados en movimientos pacifistas. La idea subyacente es dar una de cal (la guerra de Libia) y una de arena (bajar el consumo de gasolinas). Así mantenemos contenta a la parroquia y no sufrimos mucho desgaste electoral.

También hay muchos ciudadanos que llamo respetuosamente "bienpensantes" porque aceptan las decisiones gubernativas (sean del gobierno que sean) con el argumentario que les acompañe (aunque sea pobre o falso) y sin cuestionarse nada más, sin hacer un repaso crítico de lo que los mandamases nos están colando como algo bueno. Para ellos también va este guiño, esta especie de justificación de la guerra como "algo bueno".

Y otra idea que me ronda: cuando se vaya Gadafi (y creo que se irá), ¿quién va a garantizar la democracia en esa nación revolucionaria? ¿Los mujahidines que ahora combaten codo con codo entre los rebeldes? ¿Los mercenarios de Al Qaeda?

Los servicios secretos de EE.UU. alertan a sus dirigentes de la presencia de esos radicales entre las filas rebeldes (filtrado por Wikileaks).

¿Estamos seguros de que apoyamos a los "buenos" (porque la intervención de Europa está yendo más allá de un bloqueo aéreo, que es lo que se autorizó)? ¿O no hay "buenos" en esta endiablada guerra?. ¿Saldremos de Guatemala para entrar en Guatepeor?

No tengo una bola de cristal: sólo el tiempo lo dirá.

Pero la guerra, las bombas, como ha dicho el Vaticano, "nunca son la solución".