Costa Rica no descarta ir a CorteIDH por fecundación in vitro
07.10.2010
AP
Costa Rica reconoció que tiene dificultades para acatar una recomendación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que le pide derogar la prohibición a la fecundación in vitro.
El canciller costarricense René Castro dijo el jueves a la AP que no se descarta la posibilidad de dirimir el asunto en la Corte Interamericana de Derechos humanos.
"Les pedimos a las diferentes fracciones en el Congreso que se definan muy pronto, posiblemente entre lunes y martes de la próxima semana, para saber si hay voluntad política de resolver esto internamente o si el país prefiere sentarse y dejar que lo resuelva la Corte, que es una segunda opción", manifestó Castro.
La CIDH consideró que una sentencia de la Corte Constitucional costarricense que impide aplicar ese procedimiento de fertilización artificial viola el derecho que tiene toda persona de formar una familia y otorgó plazo al 23 de agosto para que el estado presente una respuesta.
Castro aseguró que se hará todo lo posible para no manchar el historial costarricense ante el tribunal, que además tiene su sede en Costa Rica.
"Podríamos tener una condena a cuestas de un país orgulloso de su récord en derechos humanos... de ser sancionados por una corte precisamente por derechos humanos", resaltó.
Costa Rica solo tiene una condena por parte de la CorteIDH de 2004 relacionada a una condena penal a un periodista y un medio local por la supuesta publicación de ofensas calificadas como difamaciones sobre un ex diplomático extranjero.
Aunque se había comentado la posibilidad de que la Presidencia emitiera un decreto a favor de la fertilización in vitro, Castro descartó ese camino para insistir en la solución legislativa.
"El decreto solo tendría sentido si hay una solución consensuada, si sabemos que a corto plazo habría una ley, el decreto lo que haría es ir preparando el terreno, por ejemplo permitiendo que el ministerio de Salud vuelva a tener las capacidades técnicas pero implementar la técnica. Eso no tendría sentido si no hay un acuerdo país", señaló.
Sobre los problemas para alcanzar el consenso, Castro citó "reticencias religiosas, otras de salud, otras de derechos humanos, es una mezcla de todo".
Pero concluyó que lo principal es definir "un derecho a la familia que no atente contra un derecho humano como lo concebimos en Costa Rica, que un embrión en el momento que existe es vida y que no se pueden eliminar simplemente los que sobran de un proceso, creo que esa es una de las preguntas esenciales".
